Maxi López llegó a la disco de Puerto Madero a altas horas de la madrugada (aproximadamente a las 3hs) acompañado de dos amigos que suelen acompañarlo siempre (según nos comentan) y por una bella morocha de la que no se despegó en toda la noche.
Maxi y la morocha (que no pudo ser identificada aun) pasaron la noche charlando, bebiendo tragos y bailando. La situación era acaramelada. Estaban atentos uno al otro y tomaron del mismo vaso entre otros detalles. Hacia casi las 5 de la mañana Maxi López notó que el fotógrafo estaba tomando fotos a la distancia y momentos después a gran velocidad se retiró por la puerta de emergencia (la que le abrió el bombero residente) a la vez que los dos amigos fueron a frenar al fotógrafo para que no se pueda acercar a registrar esa huida planeada instantes antes. Se pusieron en medio y taparon con sus manos la cámara. La morocha se fue por la misma puerta que Maxi y se retiró junto a él del lugar.